Donde ire a buscarte ahora para contarte cuanto me ha crecido el alma dentro del espacio reducido de mi cuerpo?
Ahora camino por esta ciudad tan extraña que siempre estuvo en tus sueños y no logro encontrar un sitio para ubicarnos, sencillamente: reconozco cuanto no estas.
Y lo se porque te abandone en paginas escritas cuando aun pintaba versos, cuando crei que tu amor seria el principio y el fin, cuando mis ojos miraban sin ver y escuchaban mas alla de las palabras.
Te cuento como se rompio la magia: todos crecimos menos tu. A todos se nos quebro la voz como a ti la vida. Me gusta pensar que aun habitas dentro de mi y entonces hacia alli dirijo mi pluma para escribir la carta que no podre leerte jamas y sin embargo verte reir bajito con esa tristeza tuya que se volvio cancion.
Me miro en los ojos de mi hija que tambien escribe poemas, sueña y re regodea y hace ferias de las palabras. Soy adulta con las astucias y estrecheces que temimos alcanzar. De esa manera se han espantado las musas, ante mis rabias y mies miedos y cuando regresas: dislocadas y confundidas me dejan sin aliento pensiguiendo razones y escarbandome las venas con ganas de verte pasar por mi calle, mi esquina, nuestro parque, mis veinte años, los miles de cuadernos las escapadas al cine, los pupitres dañados y las canciones que soliamos repetir.
Pero, nuestras calles ya no lo son, ahora estan vacias y esperan sin consuelo un regreso pospuesto sin cesar, la misma lluvia de antaño cae sin prisas sacando cuentas que al menos ayer pintaba arcoiris sobre la calzada.
Tampoco las ganas son las mismas: ahora dan vueltas y se niegan se ocultan, y brincan de susto debajo de la almohada. Y que te digo que ahora tengo mil esquinas donde esperarte pero en ninguna apareces!
Que hay un millon de parques con patos y palomas ocupando tu puesto y que los veinte se volvieron cuarenta y tantos y ahora solo corrijo los cuadernos de mi hija. Sin embargo se que esperas callado porque al final siempre llego donde quiera que estes. Pero sabes? Reconozco que te he fallado: ya no busco tu retrato en cada aniversario y tu nombre perdio la rima musical que enamoraba.
Amor? eso no importa. Ahora es carne y miedo, promesas incumplidas, suspiros y puestas de sol a medianoche. Huiste a tiempo y sin remedio. Pasar la pagina es la invitacion correcta y racional pero...
Aun crees en los sueños? Crees poder temblar escuchando una voz o siquiera reconocer un olor entre miles que te llene de respuestas y te agobie con preguntas? No lo se. no calmaras mi impaciencia por sentir la luna llena, ni podras caminar sobre mis pasos, ni firmaras tus besos de algodon y espuma, ni te reclamaran hipocritas todas las que te tuvieron/ hora que no eres el mismo y nos perteneces a todas.
Viejo amor que cumple diciembres. Quien soy para despertarte de tu letargo de pasto y flores con la humedad de mis ojos y mis abrazos fieles? A veces no reconozco si te amo o me dueles, solo estoy segura de extrañarte y me sorprendo pensando como seria tu voz en mi telefono o de que excusa te vestirias el fin de semana para dejarme, tu que nunca fuiste honesto y que no podras llegar esta vez porque estas muerto.
Listo el equipaje del olvido pero me niego a zarpar y retrocedo mil años y te veo frente a frente y me sacudes del hombro tu ultima reencarnacion -ahora que estan de moda para suerte mia- con un espejo roto y esa consabida maldicion del karma y el jamas. Solo que hace mucho tiempo y aun creo en el karma y ya no me importan la coincidencia de los signos o en que posicion estaba Marte el dia que te fuiste.
Hermoso rizo de tus cabellos que permanece intacto a la soledad y el tiempo: aun trato de ahuyentarte. Adios, ahora quiero que sigas dormido. Me despido de ti queriendote o no, eso no importa. Estas mas lejos que mi estrella, mas alla de mi fe, de mis temores y de mis ganas.
Adios y solo tu sabes bien cuanto odio esa palabra
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